habaneras 2016

RECITAL DE HABANERAS 2016
 «LA CÁLIDA NOCHE DE LAS HABANERAS» 
 Texto íntegro de la actuación de este recital 
viernes 12 de agosto de 2016
 El CORO JUBILOSOcompuesto por 20 socios de la Asociación de Pensionistas y Jubilados «LA BARGUEÑA», nació como nacen las cosas importantes: por casualidad.
Han pasado ya 9 meses desde su creación y estamos muy satisfechos con los resultados obtenidos porque, en realidad, sólo aspiramos a pasar ratos muy agradables haciendo lo que tanto nos gusta: reunirnos cada semana para entonar canciones.

A todos nos une el lenguaje universal y mágico de la música a través de esas canciones que fueron la banda sonora de la película de nuestra juventud.

No hubo mejor época, para la música, que la década prodigiosa. Esa ‘década’ que empieza en los años 40 con las canciones de Quintero, León y Quiroga y culminó en los míticos y recordados años 60 con las creaciones de Augusto Algueró, Manuel Alejandro, Juan Carlos Calderón, Herrero y Armenteros, Dúo Dinámico, …, …

Para esta cálida NOCHE DE LAS HABANERAS hemos escogido el marco incomparable del Parque Público "Alberto Sánchez" porque con ello intentamos darle un empujoncito a este parque.
En tiempo de verano le tenemos que dar más vidilla y sacarle más rendimiento y desde aquí reivindicamos a las autoridades municipales que se tomen en serio lo de construir en este parque un auditorio al aire libre para que en estas agradables noches de verano, podamos desarrollar audiciones musicales, veladas literarias, encuentros y bailes juveniles, etc., etc...


El lugar,  ¡qué duda cabe!, es el más idóneo de todo Bargas. Ahora mismo habrá asuntos más preferentes, pero, —por favor— que no lo arrojen al baúl de los olvidos.
 ejemplo de concha acústica (parabólica) de un auditorio al aire libre
Vamos a hablar ahora de LAS HABANERAS
Es la habanera como una fresca y olorosa brisa de mar que acaricia y envuelve, llegando directamente hasta lo más profundo de los sentidos, de los recuerdos, de las añoranzas.
El dulce balanceo de su ritmo nos incita a movernos al son de su música.

Las habaneras son un cante de ‘ida y vuelta’ que aunque nació en Cuba en la primera mitad del siglo 19 tiene sus raíces en canciones de España con los tanguillos de Cádiz, las seguidillas manchegas, ...,   ...,    ...,
Los intercambios culturales entre Cuba y España trajeron hasta nosotros este estilo musical de la mano de soldados, marineros y clérigos.

En muchas letras de habaneras se evocan los amores entre las cubanas y los españoles.
Se habla del mar/la mar, de las olas, de barcos veleros, de bellísimas mulatas, de añoranzas, de amores abandonados o imposibles, de playas de fina arena con aguas azul-turquesa, de palomas, golondrinas y gaviotas; de cálidas noches tropicales. De todo lo bello que la imaginación de los compositores ha sido capaz de impregnar en este tipo de canciones.
Las habaneras también se colaron en el género lírico de las zarzuelas y de las óperas.
En la ópera "Carmen" con música de Georges Bizet suena la habanera "El amor es un pájaro rebelde", su nombre popular es la habanera de "Carmen".

En España, las habaneras, principalmente se cultivan en CATALUÑA y en el PAÍS VASCO. También, en todo el LEVANTE, prácticamente.


♦ Torrevieja (Alicante)
♦ San Vicente de la Barquera (Cantabria)
♦ Valverde del Camino (Huelva)
♦ Calella de Palafrugell (Gerona)
...organizan cada año importantísimos festivales de habaneras y aquí, en Bargas, no queríamos ser menos.

Vamos con la primera de las habaneras. La más antigua; está compuesta hacia mediados del siglo XIX.

LA PALOMA
(Sebastián Iradier Salaverri)
habanera


Cuando                salí de La Habana,                ¡válgame Dios!,
nadie
                me ha visto salir                si no fui yo.
Una
                linda guachinanga,                ¡allá voy yo!,
que se
                vino tras de mí,                ¡que sí señor!
Si a tu ventana llega una paloma,
trátala con cariño que es mi persona.
Cuéntale tus amores, bien de mi vida,
corónala de flores que es cosa mía.

Ay, chinita que sí,
ay, que dame tu amo  or........
Ay, que vente conmigo, chinita,
→adonde
                vi        vo                yo…......

 


Vamos con la segunda de nuestras habanera:
YO TE DIRÉ
Enrique Llovet Sánchez
(de la película “Los últimos de Filipinas” año 1945)

habanera


Yo te diré por qué mi canción
te llama sin cesar, me falta tu risa,
me faltan tus besos, me falta tu despertar…
Me falta tu risa, me faltan tus besos,
me falta tu despertar.

Cada vez que el viento pasa se lleva una flor,
pienso que nunca ↑más↑→volverás mi amor.
No me abandones nunca al anochecer
que la luna sale ↓tarde y ↓me ↓puedo ↓perder.

Y así sabrás por qué en mi canción
se siente sin cesar mi sangre latiendo,
mi vida pidiendo que ya no te alejes más…
Mi sangre latiendo, mi vida pidiendo
que ya no te alejes más.

Cada vez que el viento pasa se lleva una flor,
pienso que nunca ↑más↑→volverás mi amor.
No me abandones nunca al anochecer
que la luna sale ↓tarde y →↓me ↓puedo ↓perder.

Yo te diré por qué mi canción
te llama sin cesar, me falta tu risa,
me faltan tus besos, me falta tu despertar…|
Me falta tu risa, me faltan tus besos,
me    falta       tu         des  per    tar………

Y ahora viene la tercera habanera:
LA BELLA LOLA
(anónimo cubano siglo XIX)
habanera

Después de un año de no ver tierra
porque la guerra me lo impidió
regresé al puerto donde se hallaba
la que adoraba mi corazón.

-------- estribillo --------
Ay qué placer sentía yo
cuando en la playa
sacó el pañuelo y me saludó
luego después vino hacia mí,
me dio un abrazo
y en aquel lazo creí morir.
-------------------------------

Cuando en la playa la bella Lola
su larga cola luciendo va
los marineros se vuelven locos
y hasta el piloto pierde el compás.

-------- estribillo --------
Ay qué placer sentía yo
cuando en la playa
sacó el pañuelo y me saludó 
luego después vino hacia mí,
me dio un abrazo
y en aquel lazo creí morir.
-------------------------------


La cubanita lloraba triste
de verse sola y en alta mar
y el marinero la consolaba
“no llores Lola, no te has de ahogar”.


------ estribillo final -------


Ay qué placer sentía yo
cuando en la playa
sacó el pañuelo y me saludó
luego después vino hacia mí,
me dio un abrazo
y en aquel lazo     creíí↑    morir↑↑↑

Vamos con la cuarta de la noche:
SALIÓ DE JAMAICA
Ricardo Lafuente Aguado
habanera

Salió de Jamaica, rumbo a Nueva York,
un barco velero, un barco velero cargado de ron.
En medio del mar el barco se hundió,
la culpa la tuvo el señor capitán que se emborrachó.

No siento el barco, no siento el barco que se perdió,
siento el piloto, siento el piloto y la tripulación.
Pobres marinos, pobres pedazos de corazón,
que la mar brava, ay, ay, ay...
que la mar brava, ay, ay, ay, se los tragó.

Señor capitán déjeme subir a izar la bandera
del palo más alto de su bergantín
que quiero mirar, del palo mayor,
si en el puerto se halla, si en el puerto se halla,
esperando mi amor.

Pobres marinos, pobres pedazos de corazón,
que la mar brava, ay, ay, ay...
que la mar brava, ay, ay, ay,   se   los   tra  gó…

Y ahora la quinta habanera titulada AQUELLA MURCIA.
Aquí viene ahora una bonita habanera a la que tengo un cariño muy especial.
A su autor Agustín Sánchez Martínez le conocí a través de Internet hacia el año 2001 y desde entonces iniciamos una amistad cibernética muy intensa.
Un día, hará 11 ó 12 años, me mandó por correo un disco en el que, entre otras creaciones suyas, venía la bonita habanera AQUELLA MURCIA, letra y música compuesta por él. No está en los circuitos comerciales de las canciones.
Se trata de un polifacético y prolífico artista, actividades entre las que se encuentran: la pintura, la fotografía, la talla en madera, la música, la literatura (en prosa y en verso) y la cinematografía amateur.
Es un gran enamorado, conocedor y divulgador del panocho, ese típico habla de la huerta murciana.

Hace 2 años, en el verano de 2014 hicimos una excursión y en Murcia nos pudimos conocer personalmente y darnos un fuerte abrazo.
En el argumento de esta bonita habanera, Agustín deja reflejado con mucho arte y belleza, la forma de conocer y enamorarse de su Josefina (Sefy) y describe los lugares más emblemáticos de su querida Murcia.
Ya habíamos incorporado esta habanera a nuestro repertorio cuando hace exactamente 2 meses que un ciber-amigo común me comunica que Agustín ha muerto en su Murcia natal. La habanera que interpreta el coro a continuación, es mi hondo y sentido homenaje de recuerdo hacia su persona. ¡¡Va por ti, Agustín!!
AQUELLA MURCIA
Agustín Sánchez Martínez – (Murcia 9-1-1938—9-6-2016)
habanera

Aquellos tiempos que ya pasaron
son ya imposibles de revivir
oh vieja Murcia de mis recuerdos
donde aquel día nenica mía te conocí.
En el Romea Marcos Redondo con “La Parranda”
y en el casino después tomamos juntos café
y entre las frondas allá en el parque de Ruiz Hidalgo
juntico al río cariño mío mi amor juré.
Por el malecón cogidos de la mano
al verte reír la huerta floreció
los jazmineros abrieron copos de blanca nieve
y el incensario de los galanes nos perfumó.
Por el malecón cogidos de la mano
la tarde feliz despacio declinó,
un sol de rojo pintó en el Huerto de los Cipreses
y bajo el palio de unas palmeras te besé yo.
Por Traperías nos paseamos
y en la alta torre cantó el reloj,
por la glorieta fuimos al puente
la Virgencica de los Peligros nos sonrió.
Cuando en domingo para ir a misa nos encontramos,
qué guapa vas al entrar con velo en la catedral
luego en galeras para la plaza a ver los toros,
son mil recuerdos que el alma guarda para soñar.
Por el malecón cogidos de la mano
al verte reír la huerta floreció,
los jazmineros abrieron copos de blanca nieve
y el incensario de los galanes nos perfumó.
Por el malecón cogidos de la mano
la tarde feliz despacio declinó
un sol de rojo pintó en el Huerto de los Cipreses
y bajo el palio de unas palmeras te besé yo.
Y bajo el palio de unas palmeras nació  el   amor.

TORREVIEJA        es la habanera que su hijo predilecto, el músico torrevejense Ricardo Lafuente Aguado, compuso hace 60 años y se ha convertido en el himno NO OFICIAL de Torrevieja:
TORREVIEJA
Ricardo Lafuente Aguado
habanera

Es        Torrevieja un espejo
donde Cuba se mira
y al verse suspira
y se siente feliz,     feliz,  feliz
es        donde se habla de amores
entre bellas canciones
que traen de Cuba
su alma y sentir ↑….


En        tre las olas tatuadas
vienen las habaneras
que son de La Habana
mensajes de amor,   de amor, de amor
lle       gan con suaves caricias
a través de la brisa
besan la playa con una canción.↓

Ay,      Torrevieja       divina,
ay,      con tu cielo sin par.
Eres embrujo,
canto de amores
plácido ensueño
para el que busca
soñar junto al mar→

Ay,        Torrevieja       divina,
ay,         con tu cielo sin par.
Eres embrujo,
canto de amores
plácido ensueño
para el que busca                 soñar.....    
        junto       al               mar….

LA CAÑA DULCE es una bonita habanera que habla de jóvenes y bellas mulatas cubanas, de playa, de mar, de amores y de más cosas.
Escuchadla con atención y descubriréis que su letra lleva un doble sentido.
LA CAÑA DULCE
Ricardo Lafuente Aguado
habanera

Estando yo una mañana
triste y lloroso mirando al mar
me encontré con una mulata
que me mostraba su delantal.

Quiéreme niña,
quiéreme niña, quiéreme siempre.
Quiéreme tanto,
quiéreme tanto como te quiero
y a cambio de eso yo te daré
la caña dulce, la dulce caña
la caña dulce y el buen café.

Sus ojos eran azules
como las aguas del mar de amor
y su cinturita curvada
como la caña del pescador.


Quiéreme niña,
quiéreme niña, quiéreme siempre.
Quiéreme tanto,
quiéreme tanto como te quiero
ay, mulatita salte del mar
que a mí me gusta
que a mí me encanta
que a mí me gusta tu delantal
que a mí me gusta
que a mí me encanta
que a mí me gusta tu delantal
        tu   delantal…....

LA GOLONDRINA  —  Estamos ante una mágica y mítica canción.
Esta habanera tiene una historia muy bonita, muy interesante y muy antigua. Sus raíces arrancan hacia el año 1568 aunque la creación de esta habanera está fechada en México en el año 1862.
POEMA DE ABEN HUMEYA (Hacia 1568)
En un poema escrito en árabe, original del último rey abencerraje de las Alpujarras (Granada), éste versificaba con nostalgia la despedida de su tierra. El poema fue traducido del árabe y resultó esta bonita poesía:
Al dejar Aben Humeya
por siempre a su amada patria,
a cada paso que da
el rostro vuelve y se para;
mas al perderla de vista,
las lágrimas se le saltan;
y en estos tristes acentos
despídese de Granada:
«Adiós, hermoso vergel,
tierra del cielo envidiada,
donde por dicha nací,
donde morir esperaba;
de tu seno y de mi hogar
mi dura estrella me arranca;
y me condena a vivir
y a morir en tierra extraña...
Y pues por última vez
te miro en hora menguada,
¡Adiós, Granada, por siempre!
¡Adiós, patria de mi alma!...»
«Una y otra primavera,
errando triste en la playa,
las golondrinas veré
dejar la costa africana,
cruzar el mar presurosas,
tender el vuelo a Granada,
y el nido tal vez labrar
en el techo de mi casa...
¡Ay, cuánta envidia os tendré,
avecillas fortunadas,
y cuán gozoso mi suerte
por vuestra suerte trocara!
Mas vuestra misma ventura
vendrá a renovar mis ansias,
sin que en la vida me quede
ni consuelo ni esperanza...»
Calló el moro; dio un suspiro;
y al trasponer la montaña,
por última vez repite:
«¡Adiós, patria de mi alma!...»
La poesía llevaba esta dedicatoria final:   «AL OBJETO DE MI AMOR SUBLIME».

La letra de la habanera que vamos a cantar fue escrita por el vasco Niceto Zamacois y la música es del mexicano hijo de catalán, Narciso Serradell Sevilla. Por lo tanto, aunque es una habanera mexicana, tiene profundas raíces españolas.
Veréis que la letra tiene un cierto parentesco con ese poema de Abén Humeya que acabamos de leer.
LA GOLONDRINA
letra: Niceto de Zamacois
música: Narciso Serradell Sevilla
habanera

Adónde irá veloz y fatiga a a da
La golondrina que de aquí se va a á
Oh, si en el vieento se hallará extravia a a da
Buscando abrigo y no lo encontrará
Junto a mi le e e cho le pondré yo su ni i do
En donde pueda la estacio ón pasa a a r
También yo esto o o y en la región perdi ido
Oh cielo santo y sin poder volar
Dejé también mi patria idolatra a a ada
Esa mansión que me miró nace e e er
Mi vida es hooy errante y angustia ada
Y ya no puedo a mi mansión volver
Ave queri i ida, amada peregri ina
Mi corazo ón al tuyo acercar é e e
Oiré tu ca anto, oh bella golondri ina
Recordaré mi patria y lloraré…
Observa cómo, en acróstico, se lee: «AL OBJETO DE MY AMOR» que es casi igual a la dedicatoria del poema de Aben Humeya.
(Eso se consigue leyendo de arriba a abajo las iniciales de cada verso)

Estamos ante una habanera preciosa que en México, su país de nacimiento, la tienen considerada como el himno oficial de las despedidas sentimentales.

Las golondrinas son unas aves muy protegidas. Las creencias religiosas construyeron la leyenda de que esas aves quitaron de la frente las espinas de Jesucristo crucificado.
Todos, de niños, habremos oído a a nuestros padres: "No mates a las golondrinas que son de Dios". Con las golondrinas, el gran poeta Gustavo Adolfo Bécker escribió aquella bonita poesía:
Volverán las oscuras golondrinas
de tu balcón sus nidos a colgar,
y otra vez con el ala a tus cristales,
jugando, llamarán.
Pero aquéllas que el vuelo refrenaban
tu hermosura y mi dicha al contemplar,
aquéllas que aprendieron nuestros nombres...
ésas...       ¡no volverán!

Existe otra versión de la habanera LA GOLONDRINA. Esta es más española compuesta por el músico torrevejense José Pagán López (1916—2009).
Se ve venir por la costa africana
la golondrina hacia España volar,
adónde va tan alegre y ufana
a hacer su nido; en mi casa lo hará.
Si acaso vas, golondrina dichosa,
a hacer tu nido donde yo tanto amé,
dile a mi amada que no sufra ni llore,
que yo jamás, jamás la olvidaré.

Mansión de amor, celestial paraíso,
nació en mi pecho y mi dicha soñé;
voy a subir a las altas regiones
donde feliz, feliz siempre seré.
¡Golondrina!

Ahora vamos con la novena y última de las habaneras de nuestro repertorio, titulada QUÉ TIEMPOS AQUELLOS.
Estamos ante otro buen ejemplo de cómo las habaneras se colaron también en la zarzuela. No en el palacio, sino en el género lírico.
En la zarzuela "LUISA FERNANDA" se canta una habanera que todos conocerán:
Marchaba a ser soldado
cuando al mozo le salió a despedir
la moza que le amaba y que quería
con él partir.
   –Anda con Dios, soldadito
que a las banderas te vas.
Yo te prometo y te anuncio
que vas a ser general.
Y el soldadito la contestaba:
   –Paloma mía, yo he de volver
y, en nuestra boda serán mis arras
los entorchados de brigadier.
Y allá se queda, sobre un ribazo,
con el pañuelo diciendo adiós,
la prometida del soldadito,
hasta que apenas se ven los dos.
         [...   ...   ...]

Abordamos la habanera de la zarzuela "La del manojo de rosas" del músico vasco Pablo Sorozábal.
Esa parte donde dialogan cantando sus protagonistas Joaquín y Ascensión. En ese diálogo recuerdan y evocan aquellos tiempos en que eran más jóvenes y estaban enamorados, y ya se sabe “donde hubo fuego, cenizas quedan”.
Y con esta habanera despedimos nuestra actuación por hoy con la esperanza de que os haya resultado de mucho agrado.
QUÉ TIEMPOS AQUELLOS
(de la zarzuela "La del manojo de rosas")
letra: Francisco Ramos de Castro y Anselmo C. Carreño
música: Pablo Sorozábal
habanera

¿Recuerdas el día
que nos conocimos?
Si acaso volviera...
No puede volver...
¡Qué tiempos aquellos!
¡Qué tiempo perdido!
¡Qué tiempo querido!
¡Qué pronto        se fue
para ya en la vida
jamás volver!

Estás hoy más guapa.
Pues no lo sabía.
Si yo me atreviese...
¿El qué me dirías?
Que yo soy muy poco.
Me estás ofendiendo.
Es que...      No termines.
Es que...      No tienes arreglo.

¡Qué tiempos aquellos!
¡Qué tiempo perdido!
¡Qué tiempo querido!
¡Qué pronto           se fue
para ya en la vida
jamás              vol   ver!
- - - - - - - - F I N - - - - - - - - - -